El terremoto de 7,5 grados que sacudió este martes el centro y sur de México dejaba cuatro muertos y decenas de heridos en el estado de Oaxaca, donde se localizó el epicentro, informaron las autoridades.
"Daños menores en viviendas, alertas de tsunami por posible variación en el nivel del mar y cuatro personas fallecidas es el saldo preliminar del terremoto", informó en un comunicado la Coordinación Nacional de Protección Civil.
Un balance previo daba cuenta de dos muertos.
Tres de las víctimas fatales, entre ellas una mujer, son pobladores de la zona cercana al epicentro, en la localidad de Crucecita, y perecieron por la caída de estructuras.
El cuarto fallecido es un trabajador de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), que cayó de una estructura de la refinería de Salina Cruz, en Oaxaca.
Seis horas después del temblor, el Sismológico Nacional había registrado 447 réplicas, siendo la de mayor magnitud de 4,6, añade el comunicado.
En Oaxaca el terremoto provocó además daños leves en cuatro hospitales y una clínica, y afectaciones en fachadas de tres iglesias, mercados y otras construcciones.
El aeropuerto del balneario de Huatulco sufrió daños menores, mientras que se registraron derrumbes en cuatro carreteras.
El movimiento telúrico, ocurrido cuando el país se encuentra en el pico de la pandemia por la covid-19, desató escenas de pánico en Ciudad de México.
Familias enteras que viven recluidas por la epidemia salieron a la calle, muchos con ropa de dormir y sin utilizar cubrebocas.
El sistema de alerta sísmica, que detecta los temblores y activa una señal sonora que se adelanta al avance de las ondas telúricas, se escuchó en la capital unos 60 segundos antes de la sacudida, lo que dio tiempo a muchos para salir de sus viviendas.